octubre 08, 2009

"Tercer grado": ariete mediático del calderonismo

Comentario difundido por XHUGP Radio Universidad 104.3, Puerto Vallarta, Jal.

Como todos los miércoles por la noche, anoche me senté frente al televisor para ver el programa de opinión “tercer grado” que se transmite por el canal 2 de televisa. Debo aclarar, de entrada, que mi interés en el programa estriba en que a través de la participación de periodistas vinculados todos de alguna manera a la cadena televisiva, se puede visualizar con mayor o menor nitidez, la posición no solo editorial, sino también corporativa de la empresa frente a diversos temas que resultan relevantes en la coyuntura nacional.

Conducido y moderado por Leopoldo Gómez hermano de Bernardo, brazo derecho de Emilio Azcárraga, el programa de anoche abordó los temas de la negativa del Secretario de Trabajo a la “toma de nota” de Martín Esparza como secretario general del Sindicato Mexicano de Electricistas , aduciendo presuntas irregularidades en el reciente proceso en el que resultó reelecto.

En consonancia con diversas voces empresariales, los participantes hacían énfasis en que con dicha medida el gobierno de Calderón, finalmente, mostraba firmeza ante el sindicato de una empresa -Luz y Fuerza del Centro- cuyo desastre administrativo y financiero provoca pérdidas por 40 mil millones de pesos al año. Sin ofrecer mayores argumentos culpaban al sindicato y deslizaban como solución posible, la intervención del gobierno para liquidar la empresa y terminar con el problema sindical, es decir con el sindicato. “Las condiciones están dadas”, instigaba cual estratega de los pinos, Joaquín López Dóriga.

Lo que no decían es que el desastre financiero de Luz y Fuerza del Centro no constituye un caso aislado sino que es la regla de las empresas estatales. ¿Recuerda Ud. alguna que no lo sea? Lo que tampoco dijeron es que el Sindicato Mexicano de Electricista es un sindicato combativo que ha logrado las mejores condiciones laborales para sus agremiados, ¿acaso eso es un delito? pero que también se opuso abiertamente a la entronizacion de Calderón a la presidencia.

Como último punto abordaron la carga impositiva del paquete fiscal que el ejecutivo envió al congreso. Se expresaron comentarios en el sentido de que no se aprecia de parte del gobierno federal y los gobiernos estatales medidas efectivas para reducir sus excesivos gastos que se convierten en despilfarro, cuestión con la que estoy de acuerdo, pero también dijeron que ante el paquete fiscal y sus impactos negativos los partidos políticos de oposición no presentaban mayores alternativas. “En el PRI lo están pensando” dijo alguien. Pero el Prd, agregó alguién más, los partidos de izquierda no han dicho nada. Nadie refutó esta afirmación. Nadie. Lo que demuestra que, o bien los periodistas presentes se encuentran debida y oportunamente informados de lo que hacen y no hacen los partidos –cuestión que me niego a aceptar porque sería calificarlos de ignorantes- o bien, que con plena premeditación ofrecen una información sesgada para confundir a las audiencias.

Ocultan que el PRD, el PT y Convergencia que conforman el Frente Amplio Progresista se oponen al paquete fiscal y sus cargas impositivas. Pero no solo eso, no dijeron que el FAP asume como propia la propuesta que Andrés Manuel López Obrador presentó el 21 de septiembre, la que en su parte medular establecía “obtener alrededor de 500 mil millones de pesos mediante un plan de austeridad en los tres niveles de gobierno y en los tres poderes de la Unión. Cantidad suficiente para tapar el hoyo fiscal.

Alineados a los intereses del emporio televisivo, efectivos secuaces de su poder fáctico, los periodistas de “tercer grado” instigan la eliminación física de un sindicato combativo y democrático y obedecen la consigna de desaparecer de la faz de los medios a ese personaje que incomoda terriblemente a los pinos: Andrés Manuel López Obrador.